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OPPENHEIMER, LA HUMANIDAD DE UN MONSTRUO

11 marzo, 2024

Hacía mil años que no veía la entrega de los Oscar. Pero anoche volví a ver la transmisión, porque por alguna extraña razón hice fuerza por Oppenheimer.
Fui a verla al cine por impulso, porque la sentí urgente. Nolan no está entre mis directores preferidos pero entiendo que ésta es su era. Y supongo que al haber ganado el Oscar a mejor director, esa era empieza a terminar.


Oppenheimmer es la película menos Nolan de todas, pero aún así se puede detectar su mano maestra. El tiempo sigue siendo una de las obsesiones de su narrativa. El ir y venir del color al blanco y negro y viceversa, opera como concepto para cambiar el punto de vista. Un poco recuerda a Memento, que para mí es su mejor película a la fecha.

Cillian Murphy merecía el Oscar, lo tiene bien ganado. De la misma manera que si lo hubiera ganado Paul Giamatti por su genial interpretación de un rancio y odioso profesor de Historia Antigua en The holdovers (Alexander Payne, 2023). Murphy ha logrado interpretar como el peso de la Historia descansa sobre los hombros del padre de la bomba atómica. Su mirada, cristalina, refleja la desazón del tipo que creó el arma que bien podría destruir el mundo. Le aporta humanidad a un monstruo que no parece tal, porque también le ha tocado ser víctima como consecuencia de su creación.

Cillian Murphy. El irlandés de 47 años, inmortalizado como Thomas Shelby, Peaky Blinders. Ahora triunfó como Robert Oppenheimmer.

Por esta maravillosa interpretación, a partir de esta película, ya no será más el de Peaky Blinders o cualquier otra caracterización que haya hecho en el pasado, será para siempre Robert Oppenheimer. Esta es la clase de película donde el protagonista tiene más peso que el director. Oppenheimer es más de Murphy que de Nolan, aunque sea injusto decirlo.


Podría haber hinchado por la última de Scorsese (Killers of the Flower Moon, 2023) que es un peliculón, y de hecho es mucho mejor que Oppenheimer, pero mi corazón estuvo con la de Nolan. Porque esta última tiene la fuerza de la Historia trágica del siglo pasado, ya que el personaje es mucho más rico y porque quería que Cillian Murphy levantara, de una buena vez, esa maldita estatuilla. Porque de esa manera, calculo, la imagen de Robert Oppenheimer consigue un poco de redención, que sospecho fue el verdadero propósito de Nolan.

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Charly Longarini

Periodista, y lector voraz. Escribe para La Patria Futbolera. Estudia Letras en la Universidad Nacional de Hurlingham. Cinéfilo. Seguilo en sus redes.