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OJOS BIEN CERRADOS: Un film de Stanley Kubrick

31 marzo, 2023

Hacia Viernes Salvajes

La última obra maestra de Stanley Kubrick fue el divorcio entre Tom Cruise y Nicole Kidman.

No lo supe cuando salí del cine, me doy cuenta hoy veinticuatro años después. Creo que podría afirmar sin lugar a dudas que 1999 es «el» año cinematográfico, al menos para mí. No sólo porque se han estrenado grandes películas que marcaron lo que iba a venir a continuación (está bien, se iban los 90, entraban los 2000 con todo) sino también porque fue el año que estudié cine y la cabeza se me abrió para siempre. Nunca más volví a ver una película de la misma manera.

Ojos Bien Cerrados (Eyes Wide Shut, 1999) se estrenó el jueves 2 de septiembre, al otro día, es decir el viernes, tuve franco en mi trabajo y me fui al cine. Llegué a la película por tres grandes motivos. El primero, un profesor la vió el día del estreno y contó una escena donde el personaje de Cruise entra a un salón y presencia una orgia, pero describió la secuencia desde la puesta de cámara, la fotografía y un piano punzante que marca el tono de toda la película. Segundo, era la primera posibilidad de ver una película de Kubrick en el cine. Sus películas anteriores fueron Full Metal Jacket (1987) tenía 11 años y The Shinning (1980) tenía 4. Y tercero, ya se decía, que Kubrick de alguna manera se burlaba de la pareja más famosa del mundo.

Así que fuí, saqué la entrada en un cine de av Cabildo, antes de entrar a la sala me escapé al McDonald’s y me compré tres hamburguesas con queso, en un kiosco compré una lata de Sprite y unos M&Ms. Con todo eso escondido en mi mochila, entré a la sala y como era la primera del día, salía a mitad de precio, que según recuerdo eran $3,50. Estaba solo en el cine a esa hora. No recuerdo los trailers que ví, pero cuando la sala se puso totalmente a oscuras, para darle comienzo a la película, aún seguía solo.

Al salir, entre flasheado y con ganas de escribir, me preguntaba de qué iba la película, que es lo que ésta intentaba dialogar con el espectador. Era obvio que el sexo era un tema en primer plano. Pero no podía pensar mucho, aún retumbaba ese piano que parece que lo tocan a martillazos, la escena en donde descubren al personaje de Tom Cruise como un intruso. Pero sobre todo, también me pregunté si en la discusión entre los protagonistas, que es la que desata toda la trama, cuánto se podía vislumbrar ahí realmente del matrimonio Cruise-Kidman.

Ambos actores, pareja en la vida real, protagonizaron Ojos Bien Cerrados. Seguramente Kubrick sabía que era su última película, aunque creo que no imaginó que moriría antes del estreno de ésta. El filme está plagado de referencias a toda su obra. Es como si fuera el capítulo final que redondea todo.

Los rumores durante el largo rodaje despertaron la curiosidad de la prensa y la opinión pública. Se hablaba de una película muy sexual, sobre todo, porque supuestamente se trataba de una pareja de sexólogos, cosa que no fue así finalmente.

El dr. Bill Harford y su esposa Alice sostienen una discusión de pareja una noche luego de una fiesta. Entre otras cosas que se dicen, ella le termina confesando que durante las vacaciones pasadas se ratoneó con un marine y que consideró la posibilidad de renunciar a todo por una noche con él. Bill, herido en su orgullo y enojado, se lanza a la calle a despejarse.

En un bar se encuentra con un viejo compañero de universidad. Éste le cuenta que en breve debe ir a tocar el piano a algún lugar que todavía no sabe dónde queda pero que lo hace con los ojos vendados. Es ahí donde la curiosidad de Bill se enciende y le pide que le diga todo lo necesario como para poder ir. A partir de ese momento el dr. Harford se sumerge en las profundidades de una sociedad secreta, que bien podría ser Los Iluminati, en la que aparentemente estarían involucradas personas ricas y poderosas. Lo mueve el deseo de estar con otras mujeres pero más el despecho. Hasta que lo descubren. Ahí empieza una historia de persecuciones y paranoia.

Se cuenta que Kubrick fue un intenso al momento del rodaje. A lo mejor la pareja más famosa de Hollywood estaba atravesando el inicio de una crisis que después derivaría en la separación, pero conociendo como Kubrick manipulaba emocionalmente a sus actores, no seria de extrañar que haya fogoneado esa ruptura a los fines que la película se enriquezca. Poco se sabe de ese rodaje, son muchos los rumores que giran en torno a éste, que por cierto nunca pudieron comprobarse.

Cuando el personaje interpretado por Tom Cruise se mete en problemas, en apariencia serios, uno se pregunta porqué lo hace. Y uno entiende que es llamado por el canto de las sirenas, ese canto al que no puede resistirse. Y ahí está el motor de toda la trama.

Ojos Bien Cerrados es una obra monumental, tiene todos los elementos de una película de Kubrick, los encuadres, los tonos, la música, los planos con steadycam, el uso de los espacios cerrados. Está, para mí, a la misma altura que El Resplandor.

Está basada en la novela Relato soñado (Traumnovelle), de Arthur Schnitzler. Que si bien mantiene la estructura narrativa, cambian los nombres de los personajes y los contextos. Está ambientado en la ciudad de Viena en 1920 durante el carnaval. La obra de Kubrick, en cambio, transcurre en New York durante la Navidad del fin de siglo XX. Kubrick, desde hacía décadas, quería escribir un guión que tuviera al matrimonio como tema y como protagonista.

Cuando leyó la novela se dio cuenta que había dado con una historia poderosa en los que pudiera hablar de la obsesión sexual y los celos. Por eso le atraía trabajar con una pareja real. Había pensado primero en Kim Basinger y Alec Baldwin pero ambos venían de coincidir en dos películas. Entonces Cruise, Kidman y Kubrick se reunieron en la mansión del director y ambos actores se comprometieron a no involucrarse con otros proyectos mientras durara el rodaje. A Tom le seducía sobremanera la posibilidad de trabajar bajo las órdenes de una leyenda como Kubrick. Durante el rodaje el director indagó en las intimidades de la pareja donde ellos compartieron sus obsesiones y sus miedos que Kubrick nunca reveló pero si usó para la película.

El rodaje empezó en noviembre de 1996 y finalizó en junio de 1998. Demandó más de 400 jornadas y se transformó en la filmación más larga de la Historia. El primer corte estuvo listo el 1 de julio de 1999. Seis días después falleció Stanley Kubrick de causas naturales. Diez días después se entrenó y se convirtió en su película más exitosa en cuanto a recaudación.

Para algunos es una película dispar, para otros una obra maestra. Lo que es indudable es que es perturbadora y la más oscura de un director obsesivo.

Para mi, Ojos Bien Cerrados juega en el mismo tono que El Sueño de los Héroes, novela escrita por nuestro Bioy Casares, que es la evocación de una intensa noche de carnaval y tratar de revivir esa celebración. Pero, también ésta, puede ser una reformulacion de Sueño de una Noche de Verano, de Shakespeare donde el mundo se invierte por una noche.

Como sea, es una película rara. Inclasificable, aún dentro de una obra de un autor raro e inclasificable. Pero, aún así y todo, recomendada con los ojos cerrados.


Charly Longarini

Periodista, y lector voraz. Escribe para La Patria Futbolera. Estudia Letras en la Universidad Nacional de Hurlingham. Cinéfilo. Seguilo en sus redes.