LA LITERATURA NOS ATRAVIESA
Se oye decir por diferentes ámbitos, una cuestión que parece una nueva moda. La literatura no sirve para nada. Incluso algunos escritores lo repiten. La frase me parece un acto de soberbia de aquellos que tienen pocas tensiones en su vida, o le preocupa nada, las miserias cotidianas que se viven alrededor. Un sólo libro que nos impacte, nos atraviese, que nos interpele-tal vez una de las funciones de toda obra artística– servirá para tirar por la borda, esta moda de inutilidad literaria. Lo de la borda no está demás, porque mi asunto viene en barco, o en un libro que menciona una embarcación cuyo trayecto es un largo río africano, para adentrarse en una territorio inhóspito.
Fue en este mes que me crucé con la lectura de Joseph Conrad: El Corazón de las Tinieblas, un texto que diferente, pero que trata una diagonal con el Facundo, de Sarmiento. Desde su propia lógica, la civilización realiza una muestra de la barbarie.
Es Marlow, un marino inglés avezado que va adentrarse con su embarcación, río arriba, para ingresar al Congo. Es un informe de viaje, que se hace más interesante cuando el barco, no pueda continuar, y Marlow deba convivir en aquel paraje selvático, y donde el otro, es una amenaza. Al despertarse con el barco encallado los pobladores locales rodean el barco, y uno de los personajes dice, «Nos asesinarán a todos en medio de esta niebla».
«…La multitud salvaje de obedientes adoradores, la oscuridad de la selva (…) el redoble de tambores, regular y apagado como el latido del corazón».
EL CORAZÓN DE LAS TINIEBLAS. CONRAD. J.
Escrito en aquella etapa que el historiador Eric Hobsbaum denominó la era del Imperio, –último cuarto del siglo XIX– cuando las naciones potencia navegan para conquistar nuevos mercados, y el continente africano, no queda exento, del comercio capitalista. El Congo, está bajo dominio belga, y los congoleños representan para el ojo de Marlow a «la multitud salvaje», pero también una población sometida al hambre, la peste, y los métodos brutales de trabajo, además de la hostilidad de la naturaleza.
En definitiva Marlow y el agente comercial inglés Kurtz, (el sentido del viaje de Marlow, culmina siendo el encuentro con Kurtz), que vive hace mucho tiempo en la espesura de la selva africana siendo adorado por una tribu; ambos representan la civilización europea, metida en el corazón de lo primitivo. Pero lo más trascendente es que Conrad, lo escribe como una manera de visibilizar, de contar el revés de la trama de una Europa que se expande, del imperio que crece. En definitiva representa una crítica al colonialismo europeo.
LAS NUEVAS TINIEBLAS
En la Aldea global pareciera obsoleto hablar de imperio y colonia, de civilizados y bárbaros, aunque los esquemas de desigualdad se repiten, veamos.
«Los miembros del G20 han recibido 15 veces más dosis de vacunas contra la COVID-19 per cápita que los países de África Subsahariana».
www.unicef.org
En una revisión, nos encontramos con números de cantidad de vacunados cada 100 habitantes, África es el continente con menos población vacunada, y al que menos vacunas han llegado. Parece que ha fracasado Covax, el programa para asistir de vacunas a los países más necesitados, programa bien intencionado impulsado por OMS, Gavi y UNICEF, pero sin el éxito esperado. La mayoría de las vacunas Covax, las proveería Astrazeneca, del laboratorio Indio, Serum Institute India, que por supuesto es imposible que pueda proveer, siquiera el 30% de las dosis. Los países ricos acapararon vacunas, y entregaron un porcentaje menor, de manera desorganizada. (1)
En la tabla, los países menos favorecidos, donde las vacunas no han llegado. el norte africano son los que mejor distribuyeron- un promedio entre 70 y 120 dosis, cada 100 personas), tal vez pensando en las migraciones que ocurren cruzando el Mediterráneo, hacia el viejo continente. Marruecos, Malta, Libia y Egipto, integran la lista.
| PAÍSES | CANTIDAD DE DÓSIS CADA 100 Personas |
| REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO | 0.43 vacunas |
| CHAD | 2.22 vacunas |
| SUDÁN DEL SUR | 2.80 vacunas |
| MADAGASCAR | 3.42 vacunas |
| TANZANIA | 3.95 vacunas |
| CAMERÚN | 3.76 vacunas |
| BURKINA FASO | 5.86 vacunas |
| NÍGER | 7.08 vacunas |
| MALI | 7.92 vacunas |
| SUDÁN | 8.27 vacunas |
| ETIOPÍA | 9.31 vacunas |
| SOMALÍA | 9.84 vacunas |
| ZAMBIA | 12.91 vacunas |
| REPÚBLICA CENTROAFRICANA | 12.28 vacunas |
| GABÓN | 21.91 vacunas |
| KENIA | 21.14 vacunas |
La Argentina tiene 187, 17 dosis cada 100 habitantes, Estados Unidos 121, Canadá 201,19, y entre 185 y 200 vacunas cada cien cuentan, España, Francia, los países del Escudo báltico y países bajos. ¿Se entiende no?, hay una docena de países africanos, que tienen menos de 10 dosis aplicadas, cada 100 habitantes. Si Marlow navegara hoy el río Congo, ¿Qué espectáculo vería a su alrededor, en este nuevo viaje al corazón de la barbarie?. Tal vez, para esto sirva la literatura.
(1) Veáse la distribución desigual de vacunas en https://cutt.ly/pOy7Qai
Matías J. Escot. Docente de Historia . Apasionado por la historia argentina, letras y política. Escritor, divulga la historia de nuestro país en Relatos del Sur Autor del libro “Escritores en Combate 1”