Saltar al contenido

El Gol que más grité

12 abril, 2020

Probablemente no todos recuerden claramente cuál es el gol que más gritaron en sus vidas.

Muchos te dirán, al menos en esta tierra, que fue el de Claudio Caniggia a Brasil. Tal vez el de Diego Maradona a los ingleses. Pues no es mi caso. El que más grité es el tercero de Independiente a Olimpia en la Copa Libertadores de 1984. Independiente la jugaba por haber sido Campeón de Primera División en 1983. Dirigido por José Omar Pastoriza.

1.

Estaba en la cancha, con mi viejo y mi padrino. Al Rojo solamente le servía ganar. El empate lo eliminaba. La victoria lo dejaba en inmejorable posición para superar la primera rueda puesto que obligaba a Olimpia a hacerle al menos 4 goles a Estudiantes (ya eliminado) en La Plata. En aquellas Copas clasificaba nada más que el primero de la zona. (El rojo, Sportivo Luqueño, Olimpia y Estudiantes de La Plata, estaban la zona 1).

Ganaba el Rojo uno a cero antes de los dos minutos de juego. Claudio Marangoni, de cabeza. Pero Olimpia de Paraguay lo dio vuelta. Se puso dos a uno arriba. Faltando unos 15 minutos lo empató Jorge Burruchaga con un penal al menos dudoso. Sobre la hora el Bocha hizo poesía…

2.

Ricardo Bochini, tomó la pelota en mitad de cancha, con pase de Alejandro Barberón, que corría como lateral derecho. Continuó picando, y cruzó la cancha, para colocarse en su posición natural de puntero izquierdo. El bocha, trasladó unos pocos metros adelantándose a la marca de un futbolista de Olimpia y dándole tiempo al mismo Barberón a ganar la espalda de los defensores. Después, colocó un pase filtrado, con zurda (el Bocha era diestro, pero eso es un detalle), entre el cuatro y el dos diríamos si hablamos de numeración tradicional, en un espacio donde apenas cabía una Tango número cinco. De esta manera «Porota» Barberón llegó con esa eléctrica velocidad tan característica, moviendo los brazos muy rápidos, como sus poderosas piernas y de primera tocó al centro. Sin controlar, Sergio Buffarini la empujó al gol.

Observen bien el modo en que pica Barberón. No es solamente que se muestra para recibir, generando un espacio. La Porota corre con la más absoluta certeza de que el pase de Bochini llegará perfecto, con ventaja, con casi todo resuelto. Para que los delanteros cumplan con lo que exige la burocracia del área: toque atrás y pase a la red. Solamente, la certeza que da la fe en un Dios perfecto e infalible que juega de diez puede hacer que un futbolista corra sin más preocupación que la de llegar al encuentro con la pelota.

Fijense que Barberón entrega a Bochini y se desentiende de todo. Sólo fija su mirada allá, a espaldas de los defensores. No hay un pedido, un gesto de “tirala allá”. Nada. Correr para encontrarla. Milagros bochinistas.

El modo en que pica Barberón al claro, y el pase mágico de Ricardo Bochini. El rojo pasaba la primer fase. Después sería campeón contra Gremio.

3.

Años después, verano de 1988, estábamos en Mar del Plata con mis viejos. La chica que salía conmigo en ese momento también había ido a veranear con su familia y esa noche vino a comer al departamento que alquilábamos. Había una tele en blanco y negro muy chiquita. Un 14”, según recuerdo. En esos años no existían los programas de archivo ni la repetición permanente de los goles. De hecho es una suerte que las imágenes estén.

La cuestión es que yo no había vuelto a ver el gol, ese gol, el que más grité en mi vida. Supongo que lo habría visto en algún noticiero al día siguiente del partido y nada más. Nunca más. Pero esa noche, no se a cuento de qué, dieron el gol. Y lo pude ver. Y no pude evitar lagrimear. Llorar, bah. Con todas las de la ley. No sé como funciona ahora la cuestión, pero según mi recuerdo, que un pibe de 17 años en la época en que yo tenía esa edad se emocionara por algo tan “trivial” no estaba del todo bien visto. Digo, que se yo. Porque, como la llamé acá arriba, la chica que salía conmigo me tiró algo así como “vos sos tarado o ¿que te pasa?”. Nada… no me pasa nada… dejá… que te voy a explicar…

La-Patria-Futbolera-Entrenossocialinfo
Charly Longarini, Martín Ripari y al fondo sentado Diego Joy. Ellos hacen «La Patria Futbolera», un programa que recupera la reflexión sobre el fútbol-juego.
Diego-joy

Diego Joy.  Comentarista de Fútbol. Canal Web La Patria Futbolera. https://bit.ly/3RAwT5y Buen lector de historia, y filosofía. Hincha de Independiente.


Entradas relacionadas

Los comentarios están cerrados.

Comentarios (16)

No puedo elegir uno. Es injusto jaja
Elijo 3:
1. River vs Central final de la Copa Argentina: Entra Alonso y asistencia al pipa Alario para el 3 a 3 y luego el uruguayo marca el 4 a 3 para darnos el campeonato.
2. Scocco, siempre Scocco: Gol a Boca en la final de la Supercopa Argentina.
3. Juan Fernando Quintero y un gol de otro planeta para el 2 a 1 en la final de la copa libertadores contra Boca.

De los últimos grandes goles gritados, torneo nacional B 2018/2019. Quilmes en zona complicada para descender, jugaba contra Chicago en cancha de Quilmes. Con una victoria se salvaba, empezó perdiendo 1 a 0. Lo remontó 2 a 1 con dos goles de Anselmo. A los 35 del ST, el arquero de chicago jugado en ataque sale jugando hasta 1/4 de cancha con la pelota, donde hace un mal pase y la pelota le queda a Obregon, que define con una vaselina por encima del arquero. Se gritó mucho por el alivio de que el partido ya estaba sentenciado. Aunque se iba a sufrir, inevitablemente tratándose de Quilmes, porque el partido terminó 3 a 2.

Grité muchos goles ,d esos abrazos y momentos inolvidables en la cancha,pero el GOL q más Grité fué en el último de Racing,el del Chileno Díaz,frente al Rojo faltando 5 minutos para q termine el partido.Son d esos partidos q los volvés a ver y te agarra piel de gallina.

Después del de Bedoya (Lacadé) a River (2001) pensé que nunca más iba a superar eso…..pero ganar el clásico, 45 minutos con 9 players contra 11, meter a los 86 min 4 jugadores en área rival, dejando solo 4 para defender, ese segundo antes silencio que estallaban los oídos, la para un jugador que hacía 3 min se había clavado una banana mientras marcaba por los calambres, la para, acomoda y toca muy despacito, beso precioso a la red. Racing 1 – Independiente 0.

En el 2013, el gol de San Lorenzo Campeon de la Libertadores. Hija recien nacida y lo.grité muy fuerte que la.desperté pero todo era felicidad. Eramos Campeones

El gol de Maradona ante los ingleses en el 86. Fue el último partido de fútbol que vi con mí papá.
Las intercontinentales de Boca Juniors.
💙💛💙

El gol que más grité fue el del Canni a Italia, en el mundial 90. Partido con mucho sufrimiento y me desbordó la emoción

La verdad que he gritado muchos goles, soy un amante del futbol y fanático de Arsenal de Sarandí. Los goles el de la final de la sudamericana 2007 de Martin Andrizzi, o el de licha Lopez con el que salimos campeones en el 2012 los grite mucho, si. Pero se me vino a la cabeza el gol del ascenso, Garage de penal, en cancha de Banfield, contra sarmiento de Junín, ese lo grite mucho, fue como un desahogo, y ahí estaba presenciando los hechos colgado del alambrado. El que no entiende el sentir del fútbol no entiende el fútbol.

El de Maradona contra los ingleses en el 86.

El 3 a 2 de Guerra con la nuca a river sobre el final del partido

El gol q mas me gustó mundial 90 caniggia a Brasil me encantó q buenos recuerdos

Un gol que se fija en la memoria es como un ritual eternizado. Para bien y para mal. Con todo lo que implica no desprenderse de un recuerdo. El completo desconocido Cristian Quiñones entra en el segundo tiempo. Quilmes se está quedando a fuera de local y contra Los Andes. El score: 1-3 abajo. Cómo se suele decir, fue una ráfaga inesperada. El 3a3 faltando minutos para el final del partido nos fundió a todos en un abrazo gigante. No me olvidó más de Quiñones, de sus lágrimas, de su sensación de superhéroe local. Desconozco el recorrido de la carrera de Cristian, solo recuerdo el momento que se hizo eterno en mi memoria. Lo que si se, es que con la fuerza de los rituales y la fractura de los sueños, me pasé gran parte de mi vida tratando de olvidarlos. A veces es más poderosa la fuerza del recuerdo, que los cimientos de una institución que se olvida de dónde viene.
Hermosa nota, gracias.

Qué lindo Nahuel!
Muchas gracias!!

TERCER GOL DE RIVER EN MADRID ANTE BOCA. El autor? Gonzalo Pity Martínez.

Hola. Fueron muchos los goles que realmente grité mucho. En partidos claves. El que se lleva el 1º puesto es el de Pusineri a Boca en el 2002. Ya quedaba poco tiempo, boca nos alcanzaba en puntos… y llegó ese cabezazo de Pusineri que lo grite con el alma, y a los segundos esa avalancha interminable que terminamos todos abajo en la Visera. Fue gritado con el alma y por varios segundos, minutos y horas interminables

Saludos
Eduardo

El gol que más grite fue el de Maxi Meza en la sudamericana 2017 contra el Flamengo. El partido estaba bravo y el equipo merecía ir en ventaja a brasil. Hubiera sido injusto que se le escapara la copa a aquel independiente. Sin duda ese gol fue una bocanada de aire y un grito inolvidable para el pueblo rojo.