Aunque en muchos medios nacionales haya desaparecido de agenda, como sucede con el mundo de la información, y más en esta época de ritmo vertiginoso, VICENTÍN S.A es sinónimo de conflicto. Contamos que los trabajadores de ALGODONERA AVELLANEDA solían ir a manifestarse la puerta de la casa de Sergio Nardelli. Como la empresa les debía honorarios los empleados realizaron un piquete impidiendo la entrada a la planta que duró unos dos meses.
El pasado viernes a las 5 de la madrugada, y luego de la decisión del Juez Penal Santiago Banegas, un escuadrón conformado por 200 policías, y con el apoyo de 15 móviles de la fuerza de seguridad, procedió a desalojar el piquete que mantenía bloqueado el ingreso a esa zona fabril. A partir del mediodía de ese día ingresaron unos 90 empleados, aunque el conflicto sigue. Muchos trabajadores quieren pasarse al sindicato aceitero, además el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros y Desmotadores de Algodón de los Departamentos General Obligado y San Javier, decidieron iniciar un plan de lucha gremial.
Ante un medio nacional el director de la Algodonera, Hector Vicentín deja entreveer la connotación política del conflicto, «En el país existen 10 o 12 industrias textiles, de las cuales el 40% está parada porque no tienen ventas y el otro 60% debe estar marchando al 50% de su capacidad. Ninguna, a nivel país ha tenido ni el más mínimo problema» *
Recordemos que la empresa entró en concurso de acreedores, le debía a 2600 acreedores, unos 100.000 millones de pesos, además de recibir préstamos de parte del Banco Nación, cuando estaba calificada como «empresa de riesgo». Y además le debe unos 18.500 millones de pesos a la AFIP. La algodonera tiene sus bienes inhibidos, por el juez Julián Ercolini, que junto al fiscal Gerado Policitas, trabaja para levantar, el secreto fiscal de las cuentas de los directivos de la empresa.
Por último, se relaciona con la causa de Espionaje Ilegal, un tema que salió a la luz tras las pericias al celular del . Había secretario de Mauricio Macri, Darío Nietto. Mensajes en su whatsapp autorizaban a que el Banco Nación le otorgara créditos a la empresa.
Ni los trabajadores han cobrado en tiempo y forma, ni la empresa recupera sus deudas en el extranjero, y menos cobran los acopiadores y pequeños productores. Los trabajadores levantaron el bloqueo, pero el tiempo pasa y no hay una salida para una empresa estratégica para el sector nacional, pero con una administración, por lo menos errada.
Declaración del Director Héctor Vicentín al Diario Página 12
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