Con una sólida actuación la banda de Dave Grohl fue la joya de este Lolapalooza atravesado por el trap, Nicki Nicole, el espectáculo de Bizarap, Thiago PSK, y la cumbia 420 de L-Gante, entre otros artistas, sin embargo Foo Fighters demostró que la densidad de sonido, y el espíritu rocker sigue intacto, aún cuando muchos dan el género por muerto.
Shame shame, No son of mine, fueron los temas que aparecieron del último trabajo de la banda, Medicine at Midnight, (2021), aunque el arranque fue con Times like these, una versión lenta y potente a la vez, y tal vez uno de los grandes momentos aunque hubo varios, fue cuando sonó Best of You. Además hubo una referencia nirvanera, Dave mencionó los inicios cuando se codeaba con Kurt Cobain:
“Hace más de treinta años estábamos con Kurt Cobain en el primer Lollapalooza. Él estaba muy cebado viendo a sus bandas favoritas, como Siouxie and the Banshees. Por aquel entonces, sentíamos que estábamos haciendo la revolución… Y lo fue. Ahora ustedes son la revolución».
También hubo lugar para el latiguillo ramonero, ¡Hey Ho, lets go!, que repitieron varias veces con el público, pero sin dudas lo que hará inolvidable el recital es, la inversión que se produjo cuando Dave se ubicó en la batería, y el batero Taylor Hawkins tomó la voz principal de la banda para hacer una versión de Somebody to Love, de Queen, tremendo solo de batería de Dave, y con un juego de voz de Hawkins con el público y una de las coristas interviniendo sobre el cierre de la memorable canción.
Unas cien mil personas poggearon y acompañaron los riffs de la banda de Seattle, que surgió en 1994, con su líder y fundador, ex baterista de Scream y de Nirvana, Dave Grohl.
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