El pasado miércoles 22 aterrizó en el país una flota 12 aviones en el Aeropuerto de Ezeiza. Los tres Gulfstream, dos de la serie 600 y uno de la serie 650ER, transportaron a la cúpula del banco más grande de los Estados Unidos, encabezada por su presidente, Jamie Dimon; estamos hablando del JP Morgan. A ellos se sumaron otras nueve aeronaves ejecutivas de lujo, procedentes de Nueva York, Alemania, Marruecos, Chile y Uruguay. Las matrículas N601CH, N602CH y N662CH —las de JP Morgan— ocuparon el sector reservado para vuelos corporativos y de alta gama.
Según algunas fuentes, las aeronaves que arribaron representan lo más exclusivo de la aviación ejecutiva mundial, con valores que oscilan entre los 57 y 61 millones de dólares por unidad. El Gulfstream 650ER, modelo que ostenta una autonomía de casi 14.000 kilómetros, es la nave insignia de la élite financiera global. En esta ocasión, esa élite decidió aterrizar en Buenos Aires.
El desembarco marca que el poder financiero global monitorea y condiciona de una manera abierta, no velada el rumbo de nuestra nación, en una etapa marcada por una política económica monetarista, financiera y claramente promercado. Recordemos que el Ministro de Economía Luis Caputo trabajó y es hombre de la JP Morgan. Ubicándonos en una situación colonial, casi como en aquella llegada del reino de Castilla y Aragón al continente de colonización civilizatoria
Mauricio Toscano integrante de este medio explica la cuestión geopolítica:
«Estamos en presencia de la materialización de los planes de dominio regional, durante muchísimo tiempo la puja fue teórica e ideológica ahora como hubo un franco retroceso desde el 2023 hasta la fecha, lo que se lleva a cabo es la consolidación de ese plan». Y profundiza el aporte marcando, «Este plan tiene varias aristas, por un lado a nivel regional la consolidación de Estados Unidos sobre América del Sur, tras su revés en Colombia por la asunción de Petro, (un presidente después de mucho tiempo que ofrece otra perspectiva y es disruptivo para los intereses norteamericanos en la región, otra zona que Estados Unidos e Inglaterra tuvieron presencia fue Chile que con la asunción de Boric, también recibió un serio golpe. Por último ante el resurgimiento 2.0 de Lula Da Silva en Brasil, y Yamandú Orsi en Uruguay.
Y amplía, «Por su parte Perú es una zona balcanizada y con una gran inestabilidad política, y desde ahí el tanque de ideas neoliberal Atlas, el más grande de América hace lobby para consolidar su poder en la Argentina. Así realiza la reunión anual de este grupo de intereses concentrados del enemigo real, del verdadero enemigo en la Argentina; no solamente lo hacen para consolidar poder, sino para aleccionar aquellos que fallan en el objetivo»
Javier Milei transformó al país en un experimento radical de desregulación, privatizaciones y endeudamiento en nombre de la libertad de mercado. Sin embargo esa libertad en abstracto tiene dueños concretos, que aterrizaron el último miércoles en Ezeiza. La sensación clara que dejan los jets en nuestro aeropuerto internacional. Hay un objetivo claro en cuanto a los intereses en la región una vez más Mauricio Toscano, nos aclara:
«Los intereses en la región son nuestra Patagonia en relación con los intereses sobre la Antártida y nuestras Islas Malvinas, eso para continuar explotando nuestro mar , y saquear las tierras raras y minerales indispensables para el desarrollo como el Litio.»
La Argentina y un tardocapitalismo del siglo XXI, de los jets descienden con sus trajes caros, los «adelantados» (aquel título que otorgaba la corona española a los conquistadores) que llegan en función de un orden económico que les asegure su botín, junto a los CEOS de la empresa llegan los invitados de honor, el ex- primer ministro británico Tony Blair y la ex Ministra de Relaciones Exteriores de Estados Unidos Condoleezza Rice.
Mientras se dictan los nuevos sacramentos de una liturgia que representa este capitalismo financiero y tecnológico, tan o más salvaje que el del siglo pasado, sacramentos del ajuste como penitencia, la deuda externa y la liberalización del mercado como dogma; los nuevos adelantados y sacerdotes de la élite financiera, pisan tierra firme. Los argentinos y argentinas revientan sus tarjetas para comer, pagar los servicios, y para subsistir después del 15 de cada mes, cuando el sueldo se escurrió entre sus manos. Tampoco hay financiación para Universidades, Jubilados, personas con discapacidades, obra pública.
De esta manera el gobierno libertario de los hermanos Milei «hace los deberes», nos «incorporamos al mundo»; por estas horas se está votando en el país, y resulta necesario pensar si se elige a representantes de la Libertad Avanza, o a la élite encumbrada del JP Morgan que tomará las decisiones en alguna metrópoli foránea. Tal vez la Alianza Libertad Avanza, parafraseando a Arturo Jaurectche, quien expresó de manera irónica y pícara, «Son empleados de una sucursal cuyo Casa Central queda en Londres o Estados Unidos»
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