
JUAN PABLO SUSEL
En el inicio de Cascos de acero de Samuel Fuller un soldado americano le dice a un niño coreano que es un salvaje. El chico le responde que es solo un niño. 75 años después las cosas siguen más o menos en el mismo lugar. Ahora estamos en Borneo, una isla gigante del archipiélago malayo. Allí se desarrolla la trama de Salvajes, la nueva película del director suizo Claude Barras reconocido en el mundo del cine de animación gracias a “La vida de calabacín”.
En su nueva película Barras reafirma su talento para narrar historias clásicas y universales poniendo el foco en cuestiones tradicionales del cine infantil como puede ser la búsqueda de la identidad pero también poniendo en el centro de la escena las problemáticas del capitalismo destructor de los recursos naturales del planeta tierra.
Salvajes cuenta la historia de Keria, un huérfano que rescata de la selva a Oshi, una cría de orangután que ha perdido a su madre. La vida de nuestro protagonista no será la misma desde el momento en el que decide adoptar a ese bebe huérfano que no es más que el reflejo de sí mismo ya que el mismo perdió a su madre en circunstancias veladas por su padre y que tendrán una importancia central en el desarrollo de los acontecimientos. El propio Keria es hijo de un empleado de una multinacional que explota los recursos naturales que produce el bosque y de una aborigen. A Kéria y el orangután bebe se le sumara su primo Selai que es alejado del conflicto que enfrenta a las familias nómades con las empresas multinacionales por la apropiación de los recursos naturales. Al igual que en el film de Fuller anteriormente mencionado una escena nos muestra la brutalidad de las relaciones que naturalizan el modo de vida capitalista.

Selai está en la escuela junto a su primo y unas niñas se burlan del aspecto del pequeño. Es un salvaje ríen a coro las jóvenes lo que sumerge a Selai en la vergüenza. Salvajes se hace fuerte en la descripción del choque de esos dos mundos en principio antagónicos. Selai y él bebe orangután huirán despavoridos de esa ciudad expulsiva y volverán al bosque lo que llevara a Keria primero a buscarlos y luego a reconstruir su propia historia. Ese viaje interior que reconstruirá sus orígenes familiares también le mostrara en primera persona la explotación brutal de la que es capaz el capitalismo gracias al poder del dinero y de las armas.
Barras construye una fábula atemporal que dialoga con las grandes películas de animación clásicas. Como en los clásicos de Disney el tema central es la batalla entre el bien y el mal pero en su prodigiosa animación en Stop Motion lo que prima en el cine de Barras más que los preceptos morales es una perspectiva fuertemente anticolonial que denuncia la violencia del capitalismo en su ansia irrefrenable de acumulación de riqueza. Ese bosque hermoso de Salvajes corre peligro de ser aniquilado por la codicia de las multinacionales que arrasan con todo lo que no pueden comprar.

Bifo Berardi planteaba hace algunos años que el capitalismo se encuentra en estado de metástasis. Es decir la enfermedad se ha expandido a todo el organismo y solo queda esperar el fin de este modo de producción y el inicio de un nuevo ciclo de acumulación. A este estado de situación ha llegado el hombre con su irrefrenable ansia de acumulación de riquezas. El cine contemporáneo es virtuoso en describir ese apocalipsis real que produjo el capitalismo pero le cuesta visualizar un futuro esperanzador.
«Más que preceptos morales, Barras ofrece una perspectiva fuertemente anticolonial que denuncia la violencia del capitalismo en su ansia irrefrenable de acumulación de riqueza»
Salvajes a diferencia del cine apocalíptico actual nos describe a una comunidad luminosa que se enfrenta a los depredadores y construye un nuevo mundo basado en la solidaridad, la empatía y el amor. El descubrimiento personal de Keria acerca de sus orígenes y de la muerte de su madre es lo que le permitirá empoderarse y ser el líder de la rebelión. Barras nos muestra que la verdad tanto en el plano biográfico como en el colectivo es la condición fundamental para construir un mundo que merezca ser vivido. El futuro de nuestra civilización depende de lo que hagamos cuando descubramos la verdad que nos habita.
Salvajes (Suiza, 2024). Dirección: Claude Barras. Guion: Claude Barras, Catherine Paillé, Nancy Huston, Morgan Navarro. Música: Charles de Ville. Animación: Simón Filliot. Duración: 87 minutos